¿Es necesario prohibir el uso de las tablets en las escuelas?

Alertados por el uso de los dispositivos móviles como las tablets o smartphones por parte de los más chicos de la casa, muchos padres se sienten en la obligación de quitarles el tan preciado juguete tecnológico y cambiárselos por algo más analógico, en el mejor de los casos un libro, o muchas veces por un programa de televisión.

Lo cierto es que las tablets no son los demonios de la película y que de nada sirve cambiarles un producto tecnológico por otro, en caso de que los chicos sí puedan mirar televisión y no puedan usar sus tablets. Las familias desisten ante la puja y dejan en mano del colegio el sacrificio de quitarles el chiche.

Así como en el programa académico existe la hora de computación, las escuelas debieran incorporar el uso de las nuevas generaciones tecnológicas y enseñarles a los chicos a usarlas para su provecho. Por supuesto que el entretenimiento es bienvenido, pero también la agilidad para buscar información, la discriminación de fuentes y la lectura, aunque más no sea con una tablets.